lunes, 23 de diciembre de 2013

LOS NERVIOS CONDUCEN A LA OBESIDAD

IDEAL.ES


El 40% de la población come más calorías bajo situaciones de tensión, y 30 % de las personas obesas sufre estrés, según advierten la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO)


Los nervios conducen a la obesidad
La Dra. Susana Monereo, secretaria general de la SEEDO y el Dr. Albert Lecube, coordinador del Grupo de Obesidad de la SEEN.
En una encuesta realizada por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el 83% de las personas respondió que el sobrepeso era un problema de salud, mientras que casi la mitad (44% de 1.170 participantes) reconoció tener exceso de peso, el 19 % recurrió al médico por esta causa y el 75% percibe cierta discriminación con motivo del peso. Sin embargo, en situaciones de estrés 40% de la población reacciona comiendo más, sobre todo comidas con más grasa y azúcar.
“La respuesta frente al estrés no es homogénea en todas las personas, mientras que el 20% de la población no variará su patrón alimentario, el 40% lo incrementará, con una clara preferencia por los alimentos con alto contenido calórico, es decir, alto contenido en grasas y dulces”, asegura el doctor Albert Lecube, coordinador del Grupo de Obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
 
 
“El estrés modifica nuestro comportamiento alimentario e influye en la elección de los alimentos y en el tamaño de las raciones, que aumenta. La mayoría de las personas estresadas aumentan la ingesta de alimentos que podrían denominarse de recompensa, porque resultan más placenteros para nuestro paladar, generalmente más ricos en grasas o más dulces, cuya ingesta favorece la aparición temporal de un estado de felicidad, pero que son los que desaconsejamos cuando queremos hacer una vida saludable o perder peso”, explica Lecube.
Debido a esta asociación entre estrés y obesidad, que puede afectar al 30% de la población, según datos del doctor Javier Salvador, presidente de la SEEN, se ha acoplado la palabra “obestrés”, que da nombre a la campaña para concienciar a la población durante el Día Nacional de la Persona Obesa, dirigida a ese 24% de los hombres y el 21% de las mujeres españolas que sufre obesidad, sus familiares y la sociedad en general. Este problema se extiende también a los niños y adolescentes españoles (14% presenta obesidad y el 25% sobrepeso).
Comer en familia y a las horas adecuadas
“Debemos hacer un esfuerzo por comer mejor”, insiste la doctora Susana Monereo, secretaria general de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), que recomienda evitar comer deprisa fuera de casa, comer en la mesa con toda la familia y evitar la comida delante del televisor u ordenador. “Son factores que está demostrado científicamente que determinan que haya más obesidad”.
El estrés de los padres afecta a los hijos
“El estrés no solo en inductor de la obesidad, sino que los padres estresados son capaces de inducir obesidad en adolescentes y niños”, señala Monereo. De ahí que sea importante que los padres eviten comportamientos alimentarios inadecuados, la ingesta de comida de forma impulsiva, la compra de alimentos más ricos en hidratos en carbono simple, situaciones que pueden hacer que los menores respondan de la misma manera que sus padres con las consecuencias que esto puede generar en su salud.
Cómo prevenir el estrés
• Evitar situaciones identificadas como estresantes.
• Planificar los grandes cambios en el estilo de vida (nuevo trabajo, nueva casa, etc.).
• Descubrir las limitaciones y aprender a decir No a nuevas responsabilidades que no estás seguro de poder cumplir.
• Organizar las prioridades.
• Desarrollar una actitud positiva.
• Hacer ejercicio.
• Cuidar la alimentación y dormir bien.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

TRES HERIDOS LEVES AL CHOCAR EL COCHE CONTRA UN ARBOL

IDEAL.ES


El vehículo tras volcar, recorrió cincuenta metros por la acera de la avenida de Andalucía, cerca del instituto de secundaria Virgen de las Nieves de Granada


Tres heridos leves al chocar el coche contra un árbol
Imagen del aparatoso accidente, el sábado de madrugada. :: IDEAL
Los tres ocupantes de un turismo accidentado la pasada madrugada del sábado en torno a las 2.40 horas en la avenida de Andalucía de la capital granadina deben creer en los milagros. Los tres quedaron heridos leves de un siniestro que pudo acabar como el rosario de la aurora. El vehículo, ocupado por tres jóvenes de 18 años, salía del subterráneo de la avenida de Andalucía que emerge poco antes de las instalaciones del instituto Virgen de las Nieves de la capital granadina.
Justo cuando el vehículo enfilaba la salida del subterráneo, el conductor perdió el control sobre el turismo y éste se le fue. El coche volcó y recorrió en torno a cincuenta metros por la acera, llevándose papeleras y todo tipo de mobiliario urbano que se encontraba a su paso. El turismo frenó tras empotrarse con un árbol.
Los tres ocupantes del coche solo sufrieron heridas leves. Según algunos testigos consultados, fue un milagro que todo saliera bien.
Efectivos de la Policía Local de Granada y de Bomberos se desplazaron al lugar del siniestro para auxiliar a los tres accidentados, sin dar crédito a sus ojos cuando comprobaron cómo había quedado el coche.
El vehículo, según ha informado la Policía Local, ha quedado siniestro total. No se sabe por qué el conductor, que por la edad llevaba poco tiempo con el permiso de conducir, perdió el control del turismo. Después de que se le practicaran las distintas pruebas de alcoholemia y de consumo de tóxicos, el joven dio negativo.
Durante el pasado ‘puente’ de la Constitución, en las carreteras granadinas se registraron dos muertes en accidentes de tráfico. El primero se registró el pasado domingo tras el choque de dos vehículos en Fonelas. El lunes murió otro conductor al volcar su vehículo en Loja.
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martes, 10 de diciembre de 2013

ANALIISIS DE LA DENSIDAD ÓSEA EN LA DETERMINACIÓN DE OSTEOPOROSIS


Señora mayor sonriente

¿En qué consisten la pruebas para el análisis de la densidad ósea?
La pruebas de densidad ósea miden la cantidad de hueso en una zona concreta del cuerpo, normalmente en la parte inferior de la columna vertebral, en la cadera, en la muñeca o en el talón. Los médicos recurren a estas pruebas para evaluar la posibilidad de futuras fracturas de hueso y para decidir si es necesario prescribir un tratamiento.
¿Qué puede observarse en estas pruebas?
El análisis del hueso permite predecir el riesgo global de sufrir fracturas en el futuro. La cantidad de hueso medida por el escáner suele denominarse "densidad ósea". Al igual que su altura, la densidad del hueso difiere entre las personas, aunque cuanto menor es la densidad mayor será el riesgo de sufrir una fractura. Esta prueba es mucho más útil para evaluar la densidad ósea que las radiografías, que pueden resultar equívocas.
Otras pruebas
Visite nuestra sección 'Pruebas diagnósticas' y encontrará información sobre las más frecuentes:
¿Cómo se realiza esta prueba?
El paciente debe permanecer quieto, sentado o tumbado, durante unos minutos. La mayoría de los aparatos de diagnóstico emplean un estrecho haz de rayos X, mientras que otros usan ultrasonidos. La radiación por rayos X es relativamente pequeña, apenas una fracción de la dosis necesaria para una radiografía torácica. No se utilizan agujas.
¿Por qué se exploran determinadas zonas?
Algunas zonas de exploración resultan más adecuadas en determinados pacientes. Por ejemplo, la exploración de las caderas es la mejor para predecir fracturas de las mismas, pero algunos pacientes no pueden adoptar la postura necesaria para realizarla.
La exploración de la muñeca se realiza de forma rápida y precisa, pero no puede aplicarse a pacientes que han sufrido con anterioridad fractura de ambas muñecas, o que están aquejados de ciertos tipos de artritis. La exploración de la columna vertebral ofrece resultados poco fiables en personas mayores de 60 años, y en aquéllas anormalmente gruesas o delgadas.
¿Con qué frecuencia deben realizarse estas exploraciones?
Una única exploración es suficiente, en la mayoría de los casos, para predecir el riesgo global de sufrir fracturas en el futuro. Cuando sea preciso tomar una nueva decisión en relación con el tratamiento se puede realizar otra exploración a los dos o tres años. Los pacientes en tratamiento con esteroides a largo plazo (disminuye la masa ósea), deben repetir la exploración cada dos o tres años.
¿Se sufre osteoporosis en todos los casos de baja densidad ósea?
No. Existen otras causas para la baja densidad ósea que también suponen riesgo de fracturas. Algunas de ellas son: la osteomalacia (falta de vitamina D), hiperactividad de algunas glándulas, determinados trastornos del intestino, y la osteogénesis imperfecta, una enfermedad hereditaria que se caracteriza por la aparición de fracturas en la infancia. Es importante descartar estas causas, puesto que cada una tiene su tratamiento específico, distinto del de la osteoporosis.